10 marzo 2007

A oscuras.

Cuando volvió la luz, descubrió que también iba a tener problemas con la comida y el frío. Miró a su caniche francés de dos cabezas y supo que tendría que comérselo pronto si nadie la empezaba a echar de menos. La idea de no ser capaz de ser una chica superpopular le pinchó en el estómago y se mordió los labios otra vez a oscuras.

2 comentarios:

Sintagma in Blue dijo...

Tremendo!

besos

nancicomansi dijo...

¿cómo no va a ser alguien popular con un bicho así?